Cómo crear animaciones

Cortesía de DNEG Animation y Howdybot Productions

Cómo crear animaciones

Es innegable que la animación es un campo fascinante. Desde las primeras animaciones en 2D de los años 20 hasta las innumerables series de televisión, videojuegos y películas animadas en 3D de hoy en día, nos resulta gratificante ver cómo un mundo de ficción cobra vida gracias a esta apasionante forma de arte. Si las animaciones te fascinan, ¡imagínate poder crearlas!

Aunque las primeras animaciones se hacían con herramientas de dibujo tradicionales (como papel y lápiz), hoy en día casi siempre se utilizan programas informáticos. La tecnología ha avanzado hasta el punto de que casi cualquier persona puede crear animaciones con un ordenador básico utilizando programas informáticos (a menudo gratuitos) que han hecho que el proceso sea mucho más rápido y accesible.
 

Qué cosas puedes animar

Animar implica movimiento, pero las animaciones pueden tener distintos tipos de movimiento. Es posible animar cualquier cosa que se mueva, pero los distintos tipos de movimiento pueden tener complejidades y requisitos muy diferentes. También se pueden animar cosas que en la vida real no se mueven.
 

Personajes

Uno de los tipos más comunes de animación es el que da vida a personas, animales y objetos. En esta categoría también se puede incluir cualquier cosa cuyo movimiento se asemeje al de un ser humano o animal, como marionetas, robots o monstruos. Aunque probablemente la animación de personajes sea el tipo de animación más habitual, es posible que también sea el más difícil de todos. Por un lado, una representación en 3D de un ser humano o animal vivo debe deformarse (doblarse y estirarse) en las articulaciones (por ejemplo, los codos y las rodillas). Para ello, suele ser necesario colocar un esqueleto invisible dentro del personaje para controlarlo. El personaje visible, la piel, se denomina skin, y el esqueleto y sus controles son el rig. Por suerte, los procesos de skinning, rigging y animación son mucho más sencillos que hace cinco o diez años gracias a las nuevas herramientas que se van lanzando con regularidad.

Objetos

En esta categoría, se detalla cómo animar objetos físicos sólidos, como accesorios, muebles y vehículos. Algunos ejemplos de este tipo de animación son abrir una puerta, hacer rodar una bola de bolos o mover un coche por la carretera. Este tipo de animación es más fácil de conseguir, porque estos objetos tienden a moverse o girar como un todo, no a doblarse o estirarse como un ser vivo. La animación de cualquier cosa que tenga bisagras o partes móviles es más compleja, pero muchos objetos pueden animarse simplemente moviendo o rotando todo el objeto.

Luces y cámaras

Para que las animaciones sean más atractivas, a veces basta con introducir modificaciones en las luces o la cámara. Por ejemplo, las luces se pueden animar para que cambien de color o brillo, y una cámara puede volar por una escena para simular una toma con un dron.
Cortesía de Treehouse Digital LTD

Efectos visuales

El fuego, el agua, la niebla y las explosiones son ejemplos de efectos visuales animados.
Yuki 7 es una producción de Chromosphere

Tipos de animación

Animación en 2D 

Esta forma de animación consta de imágenes dibujadas. La serie de televisión Los Simpson es un buen ejemplo de animación en 2D. Aunque hoy en día la mayor parte de la animación en 2D profesional se hace con programas informáticos, los principiantes y estudiantes pueden experimentar con este medio solo con lápiz y papel. Los «flipbooks» o libros animados son otro ejemplo de animación en 2D.

Animación en stop motion

Este tipo de animación se crea con fotografías de marionetas, figuras de arcilla y otros objetos físicos. Los animadores mueven ligeramente un objeto, le sacan una foto, luego vuelven a moverlo, le sacan otra foto, y así una y otra vez. Por tanto, si tienes muñecos de plástico o arcilla, una cámara y un ordenador de sobremesa o portátil, puedes crear animaciones en «stop motion».

 

Animación en 3D

En este género, los personajes y objetos se representan como modelos 3D en un ordenador, y cada uno de ellos está compuesto por formas geométricas. Este tipo de animación comenzó a desarrollarse en la década de los 70 y su popularidad se disparó tras el estreno de la película Toy Story en 1995.
Ejemplo de un modelo 3D para animación
Hasta los 90, la mayor parte de la animación para cine y televisión se hacía en 2D. Sin embargo, en los últimos años, cada vez más películas han ido adoptado la animación en 3D, ya sea como único método de producción o como complemento para la animación en 2D.

No es raro que en las producciones se opte por mezclar ambos tipos de animación. Por ejemplo, los dinosaurios de Parque Jurásico (1993) se crearon combinando animatrónica (un tipo de marioneta física mecanizada) con animaciones en 3D.

El tipo de animación que elijas dependerá tanto de las necesidades de tu proyecto como de tus habilidades y recursos. Cualquiera de ellos es totalmente válido. El estilo que elijas determinará las herramientas que debes utilizar.
 

Herramientas de trabajo para la animación

Para hacer animaciones en 3D, deberás crear o conseguir modelos 3D listos para la animación y tener los medios para animarlos. Al principio, puedes acelerar el proceso usando modelos 3D ya creados y animándolos en Unreal Engine. Muchos de estos modelos son gratuitos y están disponibles en el Marketplace de Unreal Engine, TurboSquid y Sketchfab. También puedes importar tus propios modelos humanos fotorrealistas, ya listos para ser animados, mediante nuestras herramientas de MetaHuman.

Si decides crear tus propios modelos 3D, necesitarás un software de creación de contenido digital, como Autodesk Maya, Autodesk 3ds Max o Blender, o puedes utilizar el conjunto de herramientas de modelado y scripting de geometría integrado en Unreal Engine.
Para crear contenido con animaciones en 2D, puedes dibujar los fotogramas en papel y fotografiarlos, o puedes utilizar programas específicos para realizar animaciones en 2D, como Toon Boom y Pencil2D. Estas herramientas también son útiles para los guiones gráficos o «storyboards» (que se explican más adelante en este artículo).

Para realizar animaciones en «stop motion», necesitarás una cámara con la que filmar las acciones. Tanto para la animación en 2D como para el «stop motion», la cámara debe fijarse o montarse en un trípode para que no se mueva durante todo el proceso.

Sea cual sea el método que elijas, tendrás que editar después el contenido para transformarlo en una película. El proceso de edición consiste en colocar las escenas en el orden correcto y añadirles sonido. Para ello, necesitarás un editor no lineal.

Si creas animaciones con Unreal Engine, puedes utilizar Sequencer, un módulo incorporado, para montar tanto planos como secuencias. También puedes usar programas independientes, como Adobe Premiere Pro y Avid Media Composer, u otras alternativas gratuitas como DaVinci Resolve, HitFilm o iMovie (solo para MacOS).

El proceso de animación

Para crear una buena animación, tendrás que preparar algunas cosas antes y ocuparte de algunos detalles al final. Vamos a ver cuáles son los pasos.
 

Empieza por una idea

El primer paso de cualquier proyecto de animación es tener una idea de cuál quieres que sea el resultado final. Puede que te hayas inspirado en una canción o que tengas una historia concreta que siempre hayas querido contar por medio de la animación.

Las animaciones son, en esencia, cortometrajes o largometrajes que cuentan una historia. Todas las historias animadas tienen algún tipo de personaje, que pueden ser personas, animales, robots, objetos domésticos animados muy revoltosos o sociedades planetarias y naves espaciales envueltas en una guerra galáctica.

Busca material de referencia

Como cualquier otro artista, un animador necesita material de referencia para que su trabajo quede bien. Si el personaje principal es, por ejemplo, un pingüino, tendrás que analizar el aspecto y los movimientos de los pingüinos reales. Si el contenido va sobre una pelota que rebota, deberás fijarte en cómo y cuándo rebota una pelota en el mundo real.

Estos materiales de referencia te ayudarán a conseguir la mejor animación posible con las habilidades que tienes.

Planifica la animación con guiones gráficos

Como en toda narración, hay que planificar bien los tiempos (es decir, marcar bien los puntos principales de la acción o la trama) para que el público capte el mensaje de la historia. Los cineastas que trabajan con acción real emplean un guion que dividen en escenas y planos. Aunque tu animación no tenga diálogos, es recomendable utilizar el mismo método.

La herramienta de planificación más común para los animadores es el «storyboard» o guion gráfico, una serie de paneles que muestran las principales acciones que van a mostrarse en secuencia. Sería algo así como un boceto de una novela gráfica, con un texto que describe la acción y el ritmo narrativo. Los dibujos del guion gráfico no tienen por qué ser obras de arte, pero sí deben comunicar los momentos clave de la historia uno a uno.

Aunque muchos artistas de animación dibujan los guiones gráficos a mano, si prefieres hacerlo por ordenador, te servirá prácticamente cualquiera de las herramientas de animación en 2D que hay disponibles. Los usuarios de Unreal Engine pueden echar mano de complementos como Epos para crear un guion gráfico en el motor.
Arte conceptual de Uplink creado por Laith Shewayish
Los guiones gráficos cumplen varias funciones. Para empezar, te darán una idea aproximada de la longitud del contenido. También pueden ayudarte a saber de si la historia funciona, si hay que añadir más escenas o si hay que sustituir una parte aburrida por algo más interesante.
Utiliza el guion gráfico para dividir la animación en escenas y planos. Por norma general, cada vez que cambias de lugar, empieza una escena nueva y, cada vez que cambias el ángulo de la cámara, se crea una nueva toma.
 

Piensa en dónde lo vas a publicar

Parte del proceso de planificación consiste en tener en cuenta en qué medio vas a publicarlo. ¿Te gustaría subirlo a YouTube o quieres hacer un GIF animado para tu sitio web? ¿Tienes previsto proyectarlo como una película?

Responder estas preguntas te ayudará con dos factores que debes decidir: la tasa de fotogramas por segundo y la resolución. La tasa de fotogramas por segundo se expresa en fps o fotogramas por segundo. Las películas suelen proyectarse a 24 fps, por lo que, si quieres darle un enfoque cinematográfico, debes trabajar con esa tasa de fotogramas. Sin embargo, gran parte del contenido de vídeo que se ve en plataformas de transmisión en línea, como YouTube e Instagram, se reproduce a 30 fps. Para empezar, puedes trabajar con una de estas tasas de fotogramas, o también puedes consultar las recomendaciones que da la plataforma en la que tienes pensado compartir tu trabajo.

La siguiente decisión que debes tomar tiene que ver con la resolución, es decir, el número de píxeles (puntos de color que componen la imagen) en la anchura y la altura del contenido acabado. En YouTube, Vimeo y otras plataformas de vídeo, la resolución que suele usarse es 1920 x 1080. Por el contrario, TikTok, Facebook, Twitter y otras plataformas de redes sociales disponen cada una de sus propias resoluciones recomendadas. Ten en cuenta que con las resoluciones más altas se consigue mejor calidad de imagen durante la reproducción, pero también se generan archivos más grandes, por lo que necesitarás más ancho de banda para retransmitirlos.
Antes de comenzar a trabajar en tu proyecto de animación, deberás calcular la tasa de fotogramas por segundo y la resolución. Estos ajustes se pueden realizar fácilmente al principio de un proyecto, pero es difícil aplicarlos a posteriori, por lo que lo ideal es que los resuelvas antes de meterte de lleno en la animación.

Si utilizas un programa informático para crear tu animación, puedes ajustar la tasa de fotogramas por segundo y la resolución de salida en la configuración de ese programa. Si tienes que fotografiar imágenes o figuras, puedes hacerlo a la frecuencia de imagen que elijas con una cámara que admita la resolución que deseas.
 

Haz pruebas con tus herramientas de animación

La mayoría de los animadores crean un pequeño proyecto de prueba antes de embarcarse en una historia animada con herramientas que no han utilizado nunca. Aunque este proyecto de prueba dure unos pocos segundos, te ayudará a resolver los problemas del proceso y te garantizará que puedes llevar a cabo todo el proyecto con las herramientas que has elegido.
 

Crea o recopila recursos

A continuación, tendrás que crear o localizar los recursos; es decir, los entornos, objetos y personajes que vas a utilizar para contar tu historia. Para ello, te servirán una o varias de las herramientas que mencionábamos antes en la sección «Herramientas de trabajo».
Otra cosa que debes tener en cuenta es el sonido que vas a utilizar en tu animación. Si hay diálogos, tendrás que grabarlos. Si tienes pensado usar música, tendrás que buscar una banda sonora.

Al elegir los recursos, la música y los efectos de sonido, asegúrate de comprobar si esos elementos tienen derechos de autor. En Internet hay muchos sitios en los que puedes encontrar recursos, música y efectos de sonido gratuitos o a muy buen precio que podrás usar sin miedo a infringir los derechos de autor de un artista.
 

¡Empieza a animar!

Ya tienes todo lo que necesitas para ponerte a trabajar de lleno en tu proyecto de animación. Configura las herramientas para la tasa de fotogramas y la resolución que has elegido y ponte manos a la obra. Usa tus guiones gráficos y materiales de referencia como guía mientras trabajas en el proyecto.

Lo habitual es trabajar en las escenas de una en una y juntarlas todas más tarde, en la fase de edición.

Renderiza las escenas

Para usar la animación en 3D, debemos renderizar cada fotograma, es decir, convertir lo que se ve en la pantalla del ordenador en archivos de imagen individuales que tu equipo pueda transformar en una película. Dependiendo del software que utilices y de la complejidad de tus escenas, este proceso puede tardar desde unos minutos hasta varios días. Asegúrate de renderizar las escenas a la resolución que requiera la plataforma que hayas escogido.

Los profesionales suelen renderizar cada fotograma en su propio archivo de imagen y, luego, juntan todos los archivos durante la fase de edición para componer una película. Esta práctica implica que, si un fotograma no queda como se esperaba en un renderizador tradicional, basta con volver a renderizar ese fotograma una vez corregido el problema, en lugar de volver a renderizar toda la secuencia.
Si utilizas Unreal Engine, que genera renderizados en tiempo real en pantalla, puedes ver cómo va quedando la animación a medida que trabajas en ella. Una animación de cinco minutos puede tardar solo cinco minutos en renderizarse y guardarse en el disco. Con un tiempo de renderizado tan rápido, no es necesario renderizar cada fotograma en un archivo individual, sino que puedes renderizarlos directamente en un formato de archivo de película, como MP4, MOV o AVI, y reproducir el archivo inmediatamente para revisarlo. Si encuentras algo que no encaja en el archivo de la película, basta con volver a renderizar toda la secuencia después de solucionar el problema.
 

Edita el vídeo animado en conjunto

Ahora que ya tienes todas las escenas listas, puedes editarlas todas juntas en una única película de animación. En este paso, es cuando juntas los fotogramas o archivos de película que has renderizado individualmente y colocas las escenas en la secuencia correcta. Aquí también es cuando añades los diálogos, los efectos de sonido, la música, los títulos de apertura y los créditos finales.

Desde el software de edición, podrás exportar la película final al formato de archivo que elijas con la tasa de fotogramas por segundo y la resolución que prefieras.

Muestra tu trabajo

Ha llegado el momento de mostrar tu trabajo. Súbelo a la plataforma que elijas y compártelo con tu familia y amigos.

Continúa la aventura de la animación

¿Todo listo para empezar a crear tu proyecto de animación? Cuando llegue el momento de animar, puedes consultar nuestro tutorial Cómo animar fotogramas clave con Unreal Engine para empezar a trabajar. También disponemos de documentación que explica cómo hacer películas en Unreal Engine y que trata sobre cinemática y la creación de películas.

También puedes visitar la comunidad de desarrolladores de Epic, donde encontrarás cientos de horas de aprendizaje gratuito en línea, incluyendo cursos sobre animación. O puedes inspirarte con el trabajo de estudios profesionales que utilizan Unreal Engine para sus animaciones accediendo a nuestro Centro de animación o consultando nuestra Guía para la animación gratuita.

Más lecciones sobre la tecnología de tiempo real


lecciones sobre el tiempo real

¿Qué es el trazado de rayos en tiempo real?

lecciones sobre el tiempo real

¿Cómo se crea un humano digital?